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“La alimentación texturizada favorece que las personas con parálisis cerebral y problemas de deglución disfruten de la comida de forma segura y participen de la vida social”

Conserva mejor el sabor, el olor y la apariencia del plato original. Se adapta totalmente a las necesidades individuales de cada persona, sin renunciar a comer lo que le gusta o a comer lo mismo que los demás.

El comer no es un mero acto de masticar y tragar para nutrirse, sino que  conlleva muchos aspectos culturales, sociales , de pertenencia a un grupo, e incluso de ocio. Cuando una persona tiene dificultades de este tipo, su dieta es monótona, perdiendo la motivación e incluso el apetito. Además no puede participar en fiestas o reuniones como los demás, y esto impacta negativamente en su calidad de vida.

Gracias a los texturizados las personas con problemas de masticación y deglución pueden disfrutar de la comida de forma segura y participen de la vida social de su entorno, comiendo los mismos platos que los demás.

Miriam Casas, logopeda de ASPACE Valladolid comenta, “hay personas con serias afectaciones  a nivel sensorio motor y cognitivo, que no pueden expresar con palabras, pero vemos que comen con mayor facilidad ahora; otras personas que nunca habían probado ciertos sabores  y ahora demandan probar cosas nuevas porque saben que también es para ellos. Personas con dificultades más leves pero que empiezan a ser mayores, a perder piezas dentarias y tener que dejar de comer ciertos alimentos potencialmente peligrosos; con este tipo de alimentación han recuperado  alimentos.

Texturizar un alimento consiste en transformar su textura, viscosidad y consistencia para poder adecuarlo a las necesidades de las personas con dificultades de masticación o deglución. Se hace mediante una serie de procesos, procurando que el alimento no cubra sólo las necesidades nutricionales de la persona, sino que ingerirlo sea una acción placentera para ella.

No hay que confundirlo con triturar los alimentos, Miriam Casas así lo explica “ en el  triturado se mezclan diferentes tipos de alimentos en un solo puré y normalmente la dieta es monótona y carente del sabor y el olor característico de cada alimento. Se pierde sensorialidad y la apariencia no es apetecible. El alimento texturizado conserva mejor el sabor, el olor y la apariencia del plato original. Se adapta totalmente a las necesidades individuales de cada persona, sin renunciar a comer lo que le gusta o a comer lo mismo que los demás.”

Para texturizar son necesarios una serie de equipos que nos ayuden en el proceso, como una máquina cutter- emulsionadora que bate, pica, tritura y emulsiona los alimentos, o un abatidor de temperatura que gelifica los alimentos en tiempo reducido. En entidades con un número elevado de personas usuarias es útil tener una mesa carro caliente, para conservar la temperatura de los alimentos una vez elaborados.

Casas habla de otros productos necesarios “utilizamos gelatina neutra de origen bovino 100%, espesantes naturales como los copos de patata deshidratada, y espesantes comerciales compuestos por goma xantana. Mangas pasteleras, moldes de silicona, molde tipo aro metálico…”

En casa también se puede preparar este tipo de alimentación de manera fácil con una batidora de calidad, una picadora y nociones básicas sobre la textura que nuestro familiar necesita, y sobre el uso de productos para espesar o gelificar alimentos.

Existen diferentes niveles de texturización según las necesidades de masticación y deglución  de la persona, a esto hay que añadir las características propias de cada alimento. 

Asimismo hay que tener en cuenta la dificultad para tomar líquidos de la persona usuaria, si realiza sellado labial o no, cómo es su masticación, las dificultades que pueda tener para transportar el bolo alimenticio o sus dificultades de deglución. Incluso dentro de la dieta para una misma persona, hay diferentes niveles de texturización dependiendo de los problemas que presente para manejar cada tipo de alimento.

En ASPACE Valladolid Miriam nos comenta que “diferenciamos básicamente cuatro niveles distintos: texturizado completo, difícil masticación, fácil masticación, dieta normal (texturizando ensaladas y frutas). “

La presentación de los platos es un factor fundamental para garantizar que la comida sea apetecible; el que a una persona le apetezca comer algo o lo rechace depende en gran parte de lo  que percibe visualmente al ponerse frente al plato de comida: el color, el olor, la forma, la combinación de diferentes alimentos dentro del plato, etc...

Para más información sobre alimentación texturizada:

“Comer es más que alimentarse”

“Guía de alimentación ASPACE”

 

 

 

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