Ha contado con la participación de 11 profesionales de 10 entidades ASPACE que forman la Red de Alimentación del Movimiento ASPACE.
El objetivo es dar respuesta a las preguntas e incertidumbres en relación con el paso a la alimentación sólida en los casos que es posible.
La alimentación es el proceso por el que se obtiene, prepara e ingiere el alimento, obteniendo los nutrientes que nuestro cuerpo necesita y que son indispensables para nuestra salud. La adecuada selección de los alimentos y su consumo en las proporciones necesarias, harán que el proceso de nutrición sea exitoso. La alimentación influye de forma directa en nuestra calidad de vida.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la nutrición es la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo. Tiene como principal función transformar y extraer los nutrientes que son imprescindibles de los alimentos que consumimos. A través de este proceso, el cuerpo genera la energía necesaria para mantener el organismo y desarrollar sus funciones. De la misma forma, produce los elementos que el cuerpo necesita para los procesos de obtención, asimilación y metabolismo de los nutrientes para nuestro organismo.
Nada más nacer los niños y niñas comienzan a alimentarse con leche materna o leches de fórmula, según van creciendo se van introduciendo más alimentos en su dieta, primero en formato purés y poco a poco se incluyen alimentos más sólidos. En menores con parálisis cerebral, profesionales y familias supervisan este proceso durante el cual les pueden surgir preguntas e incertidumbres en relación con la consecución de la alimentación sólida en los casos que sea posible.
Para ayudar a estas familias y profesionales lanzamos un documento con el que queremos dar respuesta a todos estos interrogantes que se les presentan. En él se recogen aspectos básicos de la deglución, y otros más elaborados, como componentes sensitivos y adaptaciones a la alimentación. Se trata desde la fisionomía del niño o la niña hasta el desarrollo motor, dando importancia a los aspectos sensoriales y psicológicos, como elementos prioritarios de una alimentación eficaz y segura, englobándolo en un entorno adaptado, personalizado y social.
En el documento han participado 11 profesionales de 10 entidades ASPACE que forman parte de la Red de Alimentación del Movimiento ASPACE. En él explican recomendaciones que indican si el niño o la niña está preparada para iniciarse en la alimentación con sólidos, como por ejemplo si puede mantener la cabeza erguida y es capaz de girarse a ambos lados, o si puede mantenerse sentado solo o con ayuda. También pautas para tener en cuenta cuando se inicia la alimentación sólida, como usar cantidades muy pequeñas o no mezclar alimentos; asimismo incluye objetivos que se persiguen con la introducción a la alimentación sólida como enseñar al niño o niña a distinguir sabores, colores, texturas y temperaturas diferentes, así como a fomentar la aceptación de nuevos alimentos; o promover y desarrollar hábitos de alimentación saludable.
Con este documento hemos querido también conseguir desmentir mitos relacionados con la alimentación y la deglución y dar herramientas a profesionales, familiares y personas con parálisis cerebral y grandes necesidades de apoyo. En palabras de Pilar Raigal, responsable de Alimentación y Deglución de Confederación ASPACE y coordinadora de este trabajo "el documento va a ayudar a profesionales y familias a liberarse de los miedos y tabús que existen en relación a la transición a la alimentación sólida, consiguiendo que el comer sea un acto seguro, placentero y eficaz."
DESCARGA NUESTRO DOCUMENTO DE TRANSICIÓN A LA ALIMENTACIÓN SÓLIDA
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